jueves, 1 de septiembre de 2011

CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA QUE ABUSA, VIOLA y GOLPEA... Por Florencia Lezcano

Las mujeres, por el sólo hecho de ser mujeres, estamos expuestas a que en algún momento de nuestra vida seamos víctimas de una situación de violencia. Muchas veces, esa violencia machista, no sólo actúa cuando sucede el delito (abuso, violación, golpes, secuestro y hasta asesinato), sino continúa, cuando se nos acusa de “putas”, “mentirosas”, “amantes despechadas”, “oportunistas”, etc.; sólo por atrevernos a denunciar.

Esto es lo que nos ocurrió a quienes denunciamos en el 2006 al violador de Cinco Saltos Anzaldo, en un pueblo rionegrino en el que siempre se ocultaba lo que ocurría. Más aún, tratándose del Dr. Anzaldo, ginecólogo y profesor respetado por toda la comunidad. Peor todavía si las víctimas éramos adolescentes en situación de vulnerabilidad, producto de la pobreza, la falta de educación sexual, la compañía de los padres o la contención de la escuela.

Se nos acusó, se nos señaló, incluso parte del pueblo se organizó para defender al violador en una marcha. El Consejo Provincial de Educación, las Iglesias, el Municipio, y los partidos patronales como la UCR y el PJ, no dudaron en tener una posición de complicidad con Anzaldo.

A pesar de todo hubo alguien que se atrevió a denunciar; y luego otra, y otra, y varias chica que se terminaron sumando…. De todas esas denuncias y testimonios, sólo dos llegamos a juicio. En el primero - en 2007 - logramos un éxito: la condena de 10 años de prisión efectiva.

Este no fue un logro de la “justicia”, sino de la movilización. Porque tuvimos confianza en nuestras fuerzas, pudimos organizarnos, pedir la solidaridad de las organizaciones sociales, políticas, sindicales, de derechos humanos, estudiantiles, feministas, etc.

Fuimos capaces de apoyarnos en esa solidaridad y llevar adelante una gran campaña de pronunciamientos a nivel nacional, movilizándonos a la Casa de Río Negro en Capital con una importante marcha encabezada por las Madres De Plaza de Mayo Línea fundadora, las Asambleas del Pueblo y Convergencia de Mujeres Socialistas.

Instalamos el caso en el movimiento de mujeres, viajando a cada Encuentro, desde Jujuy en 2006, logrando que pronunciamientos por la cárcel para Anzaldo, además de escraches, volanteadas, radios abiertas, etc. Todas estas acciones sirvieron para que los jueces tomaran la decisión de condenar al violador, de otra manera, hoy estaríamos diciendo que fue un caso más de impunidad...

La lucha que dimos desde Cinco Saltos ayudó a muchas mujeres del resto del país, porque les mostramos que tenemos que apoyarnos, contenernos y darnos fuerzas para denunciar, para organizarnos y ganar las calles con nuestra voz, para ir a los medios, y no permitir que el poder le siga garantizando impunidad a los violadores.

Luego de la condena a Anzaldo, en Cinco Saltos surgieron distintas denuncias de abusadores seriales, como Figueroa y Duarte, que hoy están presos, o como el docente Brizuela (que abusaba de sus alumnas de 8 años en el aula) que se encuentra procesado. Estos logros son producto de la organización y la movilización que se gestó, y que el Grupo de Apoyo a las Víctimas de Abuso mantuvo.

Por eso no es casual que ante el ataque brutal sufrido por una joven este fin de semana, en manos de su ex pareja quien la secuestró para violarla luego de golpearla y amenazarla con un arma; se respire en las calles la bronca y el repudio de las mujeres, de las amas de casa, de las enfermeras, de las docentes, de las empleadas, de las estudiantes…

E. demostró una enorme valentía, porque a pesar de todos los aprietes que sufrió estando internada por parte del candidato a intendente de la UCR, que fue a “persuadirla” para que retire la denuncia, soportó las llamadas de todos los punteros radicales y “amigos” del violador con la intención de silenciarla.

Ella decidió sostener sus dichos y contactarse con las referentes del Grupo de Apoyo, ya que hace poco participó de una marcha contra los abusos, y entendió que no estaba sola, que podía contar con otras mujeres que pasamos por situaciones de violencia y luchamos contra ella. Gracias a la reacción de E., el violador Marcelo Braicovich está detenido, lo que constituye un nuevo triunfo de las mujeres en lucha.

Hoy más que nunca las mujeres tenemos que pasar al frente para unirnos y ganar las calles, frenando la violencia que viola, que golpea y que mata. No podemos permitir un golpe más, un abuso más, una violación más, una muerte más… ¡Basta de impunidad…SI TOCAN A UNA, NOS TOCAN A TODAS!

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